La sinopsis oficial (la adjuntada en la exitosa campaña Verkami en la que se logró el objetivo prefijado gracias a las aportaciones de nada menos que cien mecenas se obviará al estar integrada en esta) versa “se acerca la noche de Halloween y el vecindario compite por ser el poseedor del grupo de monstruos más terrorífico sobornando al resto con suculentos caramelos..., compra, vende y haz tratos para conseguir la victoria”; resta así evidente el carácter lúdico de una propuesta en la que una curiosa moneda de cambio (gominolas) y la estrategia de cada cual (faroles) dictaminarán el devenir de tan grandilocuente comercio cuyo dinamismo (cada partida apenas se extiende durante unos treinta minutos) facilita sobremanera su disfrute.
Materiales
La caja contiene 110 cartas (de caramelos, monstruos y blancas) y 1 manual (catorce páginas de instrucciones ilustradas en español), amén de 4 posavasos (totalmente tematizados), 1 imán (perfectamente customizado) y 1 marcador (con forma de calabaza) como material exclusivo para quienes participaron en la financiación del proyecto; como aspectos negativos a señalar, el código de barras está situado en un lugar un tanto impertinente (en el costado inferior), no se ha contemplado un compartimento para el almacenamiento de cierto elemento (el último mencionado anteriormente) y la rigidez de los naipes exigen que se protejan debidamente (de lo contrario se deteriorarán con premura), precisándose fundas de 64x89 milímetros.
Mecánica
Tras repartir dos cartas de monstruos y caramelos (dos de 2, cuatro de 1 y una de 5, cabiendo aclarar que hay un total de doce tanto de 0 como de 5, seis tanto de 10 como de 20 y de 50 y veinticuatro de 1) a cada jugador (conviene recordar que pueden unirse de dos a seis) se irán sucediendo los turnos; los mismos se dividen en la fase de robo (coger una carta de monstruo del mazo), de cambio (descartar un espantapájaros si se tiene tres en la mano) y de acción (“veta monstruosa” para iniciar una subasta o “trato monstruoso” para comenzar una negociación), resultando ganador aquel con mayor puntuación tras agotarse todos los naipes, aconsejándose fervientemente consultar el reglamento para conocer los pormenores.
Personajes
En estricto orden de valía (indicada entre paréntesis en cada caso particular), la retahíla de criaturas comprende fantasmas (100), payasos (90), esqueletos (80), asesinos (70), lobos (60), vampiros (50), momias (40), frankys (30), muñecos (20), brujas (10) y espantapájaros (0), habiendo tres de cada a excepción de las que no tienen efecto alguno que son diez; si bien es cierto que se han omitido una infinidad de horripilantes seres no lo es menos que los seleccionados son muy representativos del género que sirve de telón de fondo, estando adaptados al público al que va dirigido (se aconseja el disfrute de la obra a mayores de ocho años aunque la supervisión de un adulto favorecería la adecuación incluso de menos edad) con sumo acierto.
Responsable
La autoría de tan atractiva obra recae sobre Anna Álvarez y Sergio Carrasco, los fundadores de Anima-T (tienda dedicada al mundo del ocio, el coleccionismo y el manga) que, en su afán de no querer parar e jugar nunca (son dos confesos sufridores del síndrome de Peter Pan), han llevado su pasión como forma de ganarse la vida; con tremenda humildad (basta con navegar por la página cuyo enlace consta en el último párrafo de la presente reseña para percatarse de ella) y generosidad (no dudaron un ápice en aceptar la colaboración de Cementerio de Noticias para difundir la idea) ha patentado una creación de verdadero mérito, no solo por la formidable estética que respeta sino por la excelsa profesionalidad que derrocha a raudales.
