“Blind date... of the dead”, de Félix Romero
Ficha técnica
Título original: Blind date... of the dead
Año: 2019
Nacionalidad: España
Duración: 18 min.
Género: Drama, Suspense
Director: Félix Romero
Guión: Félix Romero
Reparto: Albert Salmerón y Marina Arnau
Sinopsis
Amara y Charlie, dos personas que nada tienen en común, comparten una cita a ciegas que termina de la peor manera y, por si esto fuera poco, en medio de su trifulca, estalla un apocalipsis zombie del que solo saldrán con vida si colaboran y dejan a un lado sus diferencias...
Valoración
Lo mejor: la idea en sí, aunque de índole clásica, está notablemente rodada (siempre atendiendo a las extremadamente humildes circunstancias de la producción), siendo tan emocional como tríptica (por aludir dos adjetivos citados en la misma) a pesar de ofrecer múltiples pinceladas de humor (cabe destacar, amén de las póstumas tomas falsas, la ocurrencia hormonal) que, sin duda, la convierten en especial; el sentido tributo que subyace en muchos fotogramas a la mítica serie b en general y al maestro del celuloide George Romero en particular (incluyendo peligrosas plagas, humeantes fuegos, rudas confrontaciones y radiofónicas advertencias, recursos plasmados explícita y verbalmente como bien dictan los cánones preestablecidos del género), siendo todo un misterio si se trata de pura casualidad o consecuente causalidad que el autor se apellide de igual modo; la maravillosa tipografía elegida para los créditos en absoluto es una nimiedad como sucede en muchos casos, pues transporta al espectador a esa anhelada e inigualable época dorada del séptimo arte de los años ochenta como la excelente selección de temas musicales.
Lo peor: el clasicismo inicial, con la división de hombres y mujeres en dos únicos grupos (caballeros o mediocres y recatadas o extrovertidas) induce a equívocos, y es que la trama alberga mucho más que tipicidades varias y, obviando algunas peyorativas e irremediables precariedades (tal vez las más alarmantes sean el inexplicable desfallecimiento de los no muertos ante mínimas acometidas, la tranquila circulación de transeúntes por la calle contigua al emplazamiento en el que ocurren los hechos y el enigmático seguimiento ocular de la acción de cierto infectado), logra sorprender gratamente; la superficialidad que denotan los protagonistas, debido en gran parte a su latente inexperiencia actoral (lo cual provoca más empatía hacia ellos si cabe), interfiere en un mensaje argumental que no trasciende (ni pretende hacerlo) más allá del fugaz entretenimiento; la fundamentada (para dotar de dinamismo a la historia) e incesante (no transcurren apenas minutos entre sí salvo en el genial plano secuencia final) serie de cortes hace que, salvo mantener una postura sumamente comprensiva e indulgente, uno pierda atención e interés.
Daniel Espinosa
“Félix Romero’s Halloween special”, de Félix Romero
Ficha técnica
Título original: Felix Romero’s Halloween special
Año: 2016
Nacionalidad: España
Duración: 12 min.
Género: Comedia, Suspense
Director: Félix Romero
Guión: Félix Romero
Reparto: Clara Marfull, Octavia Johns, Félix Romero y Albert Salmerón
Sinopsis
Félix Romero prepara un maratón de cine de terror para la noche de Halloween, pero lo que comienza siendo una noche de diversión termina convirtiéndose en una espeluznante (y muy divertida) velada...
Valoración
Lo mejor: la escueta e inmejorable síntesis del propio autor al definir el trabajo a la hora de faciltar su enlace privado a este humilde servidor, la cual versa “con continuos homenajes a diferentes filmes y un alocado espíritu pulp la trama se resume en calabazas, tableros de oca y ardillas, muchas ardillas”; el sentido del humor que destila la obra es propio de la mejor comedia patria (la improvisada sesión de espiritismo para contactar con espirituales entidades es tal vez, obscenidades ectoplasmáticas a parte, la ocurrencia más desternillante de todas, sin desmerecer cierta declaración de amor como antesala de una suicida partida salvadora y el desenlace mismo), antojándose incluso más lograda que la mayoría ya no lanzadas en el ámbito doméstico sino estrenadas en salas comerciales; el perfecto cierre de ciclo de cortometrajes independientes en la que supone la primera colaboración (a ciencia cierta no la última) entre Cementerio de noticias y Gentleman brothers, siendo un verdadero placer haber tenido conocimiento de su existencia y contribuir a la difusión de sus más que meritorias piezas.
Lo peor: la minimalista escenografía (solo un piso) puede provocar cierto rechazo, pero el espacio está tan bien aprovechado (el posicionamiento y movimiento de las cámaras es excelente) que enseguida se cambia de parecer; la alusión a varios clásicos del terror (tales como El exorcista, Expediente Warren, Halloween, La cabaña en el bosque, La semilla del diablo, Mars attack! y Posesión infernal sin olvidar, siguiendo la hilarante línea presentada, otros más terroríficos si cabe como 50 sombras de Grey, Come, reza, ama, Otoño en Nueva York y The holiday) sin plasmar ni siquiera una escena de alguno desalienta al rememorar mentalmente secuencias de ellos, si bien se pronuncian los títulos (y sus resectivas versiones en formato físico) a modo de introducción de una trama con entidad propia; la impaciencia que produce haber visionado la filmografía completa del creador y deber esperar hasta que vea la luz su siguiente incursión, la ambiciosa y prometedora The easter holiday special, ya sea previa financiación en Verkami o mediante recursos ajenos al mecenaje si éste no fructifica.
Daniel Espinosa
“Tuna”, de Félix Romero
Ficha técnica
Título original: Tuna
Año: 2018
Nacionalidad: España
Duración: 13 min.
Género: Comedia, Suspense
Director: Félix Romero
Guión: Félix Romero
Reparto: Félix Romero, Uri Maristany, Pablo Costa y Federico Gobartt
Sinopsis
Después de una serie de muertes en la playa que parecen causadas por un tiburón, el jefe de policía y su ayudante son llamados por el alcalde de la bahía para que formen un escuadrón junto con un inteligente biólogo y un intrépido marinero a fin de dar caza al causante de tanta muerte puesto que, además, amenaza al turismo de la zona...
Valoración
Lo mejor: la obra, salvando las enormes e infranqueables distancias, nada tiene que envidiar a grandes producciones audiovisuales (obviando descuidos de enfoques y malposiciones de micrófonos), luciendo espléndidamente dicho apartado (el sensorial en general y el sonoro en particular) hasta el punto de apasionar sin remedio y abstraer durante el poco menos de cuarto hora de duración; la reminiscente pretensión respecto a la novela de Peter Benchley titulada (por si hay alguien en la faz de la tierra que no la conozca) Tiburón (antaño revisionada en la gran pantalla por el gran Steven Spielberg con un éxito sin precedentes) está muy lograda, aludiéndose detalles fácilmente identificables con ella de un modo sumamente desvergonzado pero profundamente respetuoso; la diversión que brinda el director (y guionista) compaginando momentos cómicos (las transiciones propias de la antigua serie de televisión basada en el homónimo superhéroe Batman son mortales) con tensionales, críticas sociales eternamente actuales y una filosófica frase para la posteridad.
Lo peor: la congregación de personajes tan variopintos como los recogidos llega a saturar, pues la trama tal vez no requeriría tantos para funcionar tan notablemente como lo hace a pesar del escaso rigor argumental (las ideas se ordenan parcialmente), si bien es cierto que cada minuto suma e introducirlos es tan oportuno e inteligente en semejante sentido como el maravilloso juego de cámaras empleado; el potencial alegato desfavorable que los más puritanos sostendrán en relación a los efectos especiales (bien es sabido que con paupérrimos presupuestos se han conseguido fantásticos resultados), pero cabe recordar que no deja de ser un proyecto universitario que, de hecho, se alzó ganador en el certamen en el que en dicho ámbito se presentó; la imposibilidad de no deshacerse en elogios hacia un autor tan prometedor como creativo, y es que cuando uno se dispone a escribir una crónica como la que ocupa agradece, aunque pueda (y sin la menor duda así es) antojarse políticamente incorrecto en un atrevido alarde de sinceridad, evidentes aspectos negativos a mencionar aquí.
Daniel Espinosa