“Clara despierta de una pesadilla para encontrarse acosada por una figura fantasmal... atormentada por visiones y hechos paranormales lucha contra la incertidumbre de su propia cordura mientras la amenaza de un ser diabólico que ya se cobró la vida de su hermano se vuelve cada vez más presente y ominosa”; así versa la sinopsis del proyecto Yo también la veo concebido como integración de graduación del Ciclo de Formación Profesional de Realización Audiovisual del autor con una duración (en formato cortometraje) de aproximadamente doce minutos previéndose un largo recorrido por festivales especializados (Molins de Rei, Castilla y León, Isla Calavera...) con expectativas de presentarse en otros de más calibre (Nocturna Madrid, FantBilbao, Donostia San Sebastián, Sitges...) si la acogida acaba siendo exitosa.
Bajo la batuta de Tone Chao (quien también ejerce de guionista), Luna Longoria (sufrida protagonista secundada por las intervenciones de Julia Galiana como espectro junto a Enrique Peinado como psiquiatra) se encargará de escenificar tan prometedora pieza aprovechando la enrome valía de un extenso equipo técnico (Celia Avilés, Aly Fresno, Raúl Delgado, José Solís, Casey Lizano, Amanda Gonzálea, Ángel Caro, Lucía Dastis, Adriana Vincenti, David Botello, Carmen Caballo y Julia Galiana están tras las cámaras); las referencias cinematográficas confesadas (hmuchas otras aguardan ser descubiertas para mantener intacto el factor sorpresa) abarca clásicos como El exorcista o El resplandor así como películas tan reivindicativas como El caballero oscuro o La naranja mecánica e inusuales como Hereditary o Vicious.
La historia se enfocará en crear una atmósfera de terror psicológico opresivo e intenso con una sensación de paranoia e inquietud a base de tensión creciente a medida que avanza la trama transmitiendo un abanico de potentes emociones como el miedo o la ansiedad desdibujando constantemente la delgada línea entre realidad e imaginación de una mente posiblemente enferma (la lectura real será del propio espectador); para ello se emplearán tonos fríos (básicamente monocromáticos puros) en las escenas nocturnas predominando los azules para soslayar aún más el desasosiego provocado por un ambiente desolador contrastando con otras luminiscencias en determinados decorados (como el salón o la cocina) para ofrecer una imagen preciosista pero igualmente espeluznante.
El objetivo actual es recaudar la humilde cifra de seiscientos euros en cuarenta días a través de la plataforma Verkami (archiconocida en territorio patrio por apoyar a quienes tengan una idea cultural en búsqueda de financiación mediante mecenas que con sus aportaciones forman parte de la consecución de la misma a cambio de ciertos incentivos) para sufragar los gastos iniciales; los suculentos niveles de recompensas en este caso oscilan desde los 5€ (agradecimiento en los créditos) hasta los 100€ (aparición como productor asociado además del merchandasing oficial entre el que se encuentra un póster, un guión, un storyboard, cinco pegatinas, una camiseta, una bolsa, varias fotografías, un making of, un link de visionado e incluso una invitación tanto al preestreno como al rodaje) para ajustarse a todos los bolsillos.
Desde Cementerio de Noticias (participante activo en concepto de prensa colaboradora para divulgar tamaña lindeza fílmica vía física e internet) no se puede sino recomendar encarecidamente a todo el mundo a convertirse en flamante patrocinador (en definitiva se es al contribuir económicamente en la causa) antes de que concluya la citada campaña porque a raíz de entonces (mediados de julio) comenzará la grabación para estrenarse a finales de agosto; cabe recordar que las fechas son orientativas puesto que los imprevistos en esta clase de propuestas son habituales con las consecuentes demoras siempre en aras de patentar el mejor resultado conviniendo restar paciente al respecto ya que sin duda merecerá la pena la espera a juzgar por los primeros detalles revelados recopilados en el artículo.
