Título original: Trap Año: 2024 Nacionalidad: EEUU Duración: 98 min. Género: Musical, Suspense Director: M.Night Shyamalan Guión: M.Night Shyamalan Reparto: Josh Hartnett, Ariel Joy, Saleka, Alison Pill, Hayley Mills, Jonathan Langdon, Marnie Phail, Vanessa Smythe y Malik Juballeham
Sinopsis
Un hombre acompaña a su hija a un gran concierto de música pop...
Valoración
Lo mejor: la presentación de la heredera biológica del director como diva musical se traduce en el mayor aliciente de la película, pivotando de hecho la misma sobre uno de sus apoteósicos conciertos masivos con fidedigna recreación; el sentido del humor del que hace gala la producción dibuja cómplices sonrisas en el espectador, abusando tal vez de dicho recurso hasta convertirse en paródico; el entretenimiento puro basado en impredecibles giros de guión funciona, aunque la crítica más evidente la suscitan estos al desobedecer todo raciocinio.
Lo peor: el desarrollo de la trama contiene tantas casualidades e incoherencias que resulta insostenible, sucediéndose los improvisados elementos de los que se vale el protagonista para mantener oculta su identidad; la escasa dosis de escenas violentas sorprende muy negativamente a juzgar por la naturaleza de la cinta, plasmándose en realidad únicamente dos destacables; la actitud de alguien a quien se describe como un voraz monstruo contrasta con la recogida desentona sobremanera, derrochando amabilidad incluso en situaciones propicias.
Daniel Espinosa
Llaman a la puerta (M.Night Shyamalan, 2023)
Ficha técnica
Título original: Knock at the cabin Año: 2023 Nacionalidad: EEUU Duración: 1000 min. Género: Drsma, Suspense Director: M.Night Shyamalan Guión: M.Night Shyamalan, Michael Sherman y Steve Desmond Reparto: Dave Bautista, Jonathan Groff, Ben Aldridge, Kristen Cui, Nikki Amuka, Rupert Grint, Abby Quinn, Ken Kerrigan y Denise Naka
Sinopsis
Durante unas vacaciones en una cabaña en un bosque alejada de todo los integrantes de una familia se convierten en rehenes de cuatro desconocidos armados que los obligan a tomar una ardua decisión...
Valoración
Lo mejor: la retahíla de referencias religiosas es magistral (desde la escena de apertura hasta la penúltima de cierre), debiéndose analizar en profundidad para comprender cuán plausible es; el elenco logra despertar un sentimiento de pertenencia que ni el propio guión alberga, siendo meritorio atendiendo a las pésimas circunstancias argumentales; la consecución de las anunciadas plagas se recrea formidablemente (no es ninguna revelación citarlas al aparecer incluso en el avance promocional), infundiendo verdadero terror psicológico; la belleza estética del producto es magnífica (cada plano luce majestuosamente nítido), exprimiendo un genial ejercicio camarógrafo.
Lo peor: la tríada coprotagonista resulta sumamente execrable (una pareja homosexual con una hija asiática adoptada), funcionando con tipicismos exentos de loables novedades culturales más allá de la consabida crítica social que subyace en esta clase de familias; el dilema existencial se plantea con demasiada premura (de hecho se especifica verbalmente a los pocos minutos), restando gran parte del interés que pudiera generar una narrativa menos directa; la explicitud de la intríngulis es muy ofensiva (plasmar los detalles de manera tan literal es un enorme error), presumiendo insultantemente que el espectador no tiene la suficiente valía como para captar simbolismos.
Daniel Espinosa
Tiempo (M.Night Shyamalan, 2021)
Ficha técnica
Título original: Old Año: 2021 Nacionalidad: EEUU Duración: 108 min. Género: Drama, Suspense Director: M.Night Shyamalan Guión: M.Night Shyamalan Reparto: Gael Bernal, Vicky Krieps, Rufus Sewell, Thomasin Mckenzie, Alex Wolff, Nikki Amuka, Abbey Lee, Ken Leung y Aaron Pierrensein
Sinopsis
Durante unas vacaciones en un paraíso tropical una familia empieza a percibir que en la playa suceden determinadas anomalías temporales...
Valoración
Lo mejor: la plasmación de las consecuencias típicas del paso de los años en el ser humano es magnífica (sin revelar nada es obvio desde la lectura del título que el telón de fondo pivota sobre dicho asunto), empleándose para recrearlas elementos tan simples como efectivos; el carisma del elenco logra que el público interiorice sus problemáticas (habituales donde las haya), bobrdando sus respectivos cometidos con naturalidad e intimidad; el hilo argumental absorbe la atención del espectador al no saber qué ocurre realmente hasta prácticamente el desenlace (algo normal peor no por ello menos plausible en el autor que ocupa), complaciendo este merced a un fundamento que lejos de despertar recelo invita a la profunda reflexión sobre cómo deberían estudiarse las dolencias e incluso directamente la manera de paliarlas.
Lo peor: el recurso que dinamiza la historia no es en absoluto creíble (obviar un detalle tan trascendental como el de cierta relación de amistad fraguada fortuitamente no se antoja asumible), resolviéndose la misma con una precipitación propia de un producto televisivo carente de ideas válidas; el posicionamiento de la cámara en muchas secuencias desespera al más paciente (se aproxima a un material experimental), ubicándose en lugares verdaderamente incómodos sin ningún propósito definido; la perfecta adaptación de las vestimentas a los personajes pese a su constante evolución física es totalmente irracional (resulta imposible portar tantas mudas en un viaje improvisado amén de no preveer el conflicto existencial que acontece), dilapidando cualquier atisbo de defensa de un guión repleto de fisuras.
Daniel Espinosa
Múltiple (M.Night Shyamalan, 2017)
Ficha técnica
Título original: Split
Año: 2017
Nacionalidad: EEUU
Duración: 116 min.
Género: Suspense, Terror
Director: M.Night Shyamalan
Guión: M.Night Shyamalan
Reparto: James Avoy, Anya Taylor, Betty Buckley, Brad William, Haley Lu, Sterling Brown, Kim Director, Sebastian Arcelus, Lyne Renee, Neal Huff, Jessica Sula, Maria Breyman, Steven Dennis y Peter Patrikios
Sinopsis
Una psiquiatra trata a un paciente con múltiples personalidades, pero aún queda una por emerger, una decidida a dominar a las restantes...
Valoración
Lo mejor: la trama, sostenida por un superlativo James Avoy y sus veintitrés identidades (más una adicional, como si del mejor complemento de un juego de mesa se tratase, aunque sólo la mitad se plasman extensamente), satisface por completo el visionado de la producción del primer al último segundo, amén de evidenciar el don de la reinvención por parte de M.Night Shyamalan (cuyo nombre no profesional sino completo es Manoj Nelliyattu Shyamalan), quien vuelve a inquietar con pocos medios y mucha imaginación, sugiriendo como nunca e inquietando como siempre; la serie de refutables argumentos acerca del dominio de la mente sobre el cuerpo, una especie de poder divino e infinito capaz de cambiar física y químicamente a quien sepa emplearlo correctamente y, en este caso cinéfilo, sustentar las bases de una cinta en la que convergen el suspense (el devenir de los hechos es cambiante e incierto), la diversión (las dudas e hipótesis cómicas, como si se puede embarazar a una chica con sólo besarla, se suceden para amenizar y trivializar el profundo terror psicológico que se plantea) y el misticismo (el propósito final y los sacrificios que se precisan para lograrlo son propios del ocultismo); la creíble facilidad con la que cierto asaltante provoca el caos en cuestión de segundos valiéndose de herramientas al alcance de todos para dar rienda suelta a su locura, suponiendo su humana demencia y disociativo trastorno la más oscura fábula del realizador hindú (otra más a añadir al largo listado de las que ha firmado, y es que narrar a través de leyendas es una de sus distinciones) que, cual guardián de la dignidad de lo desconocido, medita sobre los vínculos emocionales establecidos a raíz de traumas relacionados con abusos sufridos en edades tempranas (un típico tópico en sintonía con la triste realidad que padecen miles de infantes).
Lo peor: el guión consiente enormes expectativas pero contiene alarmantes deslices, tales como un fortuito e inexplicable descubrimiento de llaves, una repentina e impoluta comunicación a distancia y un portentoso e invisible control de cerrojos, por citar algunos sin desvelar demasiado; el “cameo” (es decir, la breve aparición) de Bruce Willis para enlazar el presente filme con El protegido (en el que recibía el apodo de “El cristal” y cuyo trato común era el mismo que el que recibe “La horda”, más allá de “La bestia”, en esta, residiendo la razón de ser del alias en el lugar del triple rapto que perpetúa), tan forzado como gratuito resulta el del director; el diálogo entre profesional y paciente sobre los motivos que originaron la actitud del segundo llega a agobiar por la densidad de información, llegando a abarcar muchos minutos que, aunque interesantes, son tediosos pese a que uno disfrute de la más comprensiva y estimable compañía de sangre brasileña junto a él y le colme de cariñosos gestos supletorios (comentario nada prejuicioso sino amatorio dedicado a la “namorada”).
Daniel Espinosa
La visita (M.Night Shyamalan, 2015)
Ficha técnica
Título original: The visit Año: 2015 Nacionalidad: EEUU Duración: 94 min. Género: Suspense, Terror Director: M.Night Shyamalan Guión: M.Night Shyamalan Reparto: Olivia Dejonge, Ed Oxenbould, Deanna Dunagan, Peter Robbie, Kathryn Hahn, Celia Keenan, Samuel Strick y Patch Darragh
Sinopsis
Una madre deja a sus dos hijos durante una semana con sus abuelos...
Valoración
Lo mejor: la realización exprime el bajo presupuesto (cinco paupérrimos millones de dólares) sabiamente, asemejándose a un mockumentary (aunque algunas escenas se alejan de dicho estilo al plasmar la acción en tercera persona) de corte clásico; el misterio se mantiene decentemente a base de extrañas a inquietantes escenas (algunas valga añadir gratuitas en cuanto a adecuación argumental se refiere), entreteniendo a un amplio abanico de espectactadores exentos de pretensiones mayores; el despertar del letargo creativo del director es indudable (admitiendo que en algún momento cayó en él), consiguiendo con el producto no reinventarse pero sí reencontrarse.
Lo peor: el componente cómico abunda en demasía (en especial las lindezas musicales debida pero penosamente traducidas), alejando al espectador de la sensación de peligro que el género (no deja de ser una película circunscrita en el terror) implora; el trasfondo humano (cómo no es omnipresente) apenas difiere de otros ya vistos incluso en el propio autor, perjudicando por ende a la percepción general de la producción; el detalle que justifica la teórica sorpresa final es demasiado evidente, desvelando con demasiada antelación la verdadera intríngulis (existen secundarias pero poco o nada importantes a la postre) del metraje para los medianamente curtidos.