Título original: Tenet Año: 2020 Nacionalidad: Reino Unido Duración: 150 min. Género: Acción, Suspense Director: Christopher Nolan Guión: Christopher Nolan Reparto: John Washington, Robert Pattinson, Elizabeth Debicki, Kenneth Branagh, Dimple Kapadia, Aaron Johnson, Michael Caine, Clémence Poésy, Martin Donovan, Himesh Patel, Andrew Howard, Yuri Kolokolnikov, Fiona Dourif, Jonathan Camp, Wes Chatham, Marcel Sabat, Anthony Molinari, Rich Ceraulo, Denzil Smith y Laurie Shepherd
Sinopsis
Un agente secreto deberá velar por la supervivencia del mundo entero en una misión a través del oscuro mundo del espionaje internacional...
Valoración
Lo mejor: la satisfacción que supone disfrutar de la nueva genialidad (el adjetivo admitirá puntualizaciones pero en cualquier caso es aplicable a la ocasión) de un autor que, aunque se aleje ligeramente de sus orígenes para explorar otros territorios igualmente delicados e intrigantes, nunca deja de sorprender al reinventarse con cada incursión que firma; el placer de la perplejidad es llevada al límite para ofrecer una puesta en escena sin precedentes, siendo sofisticación e imaginación los dos pilares básicos sobre los que se sustenta un guión que puede llegar a causar cierto recelo por la ambición con la que se desarrolla; la última media hora es una proeza audiovisual como nunca antes se ha patentado en el séptimo arte, un derroche de todo tipo de recursos cinematográficos en el que seguro se habrá invertido gran parte de los más de dos cientos millones de dólares presupuestarios.
Lo peor: la cantidad de conceptos que la historia abarca es descomunal (paradojas e inversiones protagonizan la mayor cuantía de la extensa duración pero hay muchos más que van presentándose a lo largo de ciento cincuenta minutos en los que apenas se conceden segundos de respiro al espectador), antojándose sumamente pretenciosa e inverosímil; la sensación de no haber acabado de asimilar el noventa por ciento de la trama pese a reproducir la cinta decenas de veces, y es que el contenido de la misma trasciende más allá de cualquier entendimiento humano por más conocimientos que se posean en las materias tratadas; el espectáculo solo es apreciable en todo su glorioso esplendor en salas comerciales, por lo que la distribución tangible (entendiéndose como tal el formato doméstico) limita en gran medida ese factor que a la postre es el más prodigioso de la superproducción.