Título original: I onde dager Año: 2021 Nacionalidad: Noruega Duración: 111 min. Género: Comedia, Suspense Director: Tommy Wirkola Guión: John Niven, Nick Ball y Tommy Wirkola Reparto: Noomi Rapace, Aksel Hennie, André Eriksen y Tor Gunstrom
Sinopsis
Un matrimonio emprende un viaje de fin de semana a una cabaña familiar en el bosque para tratar de recuperar la complicidad perdida...
Valoración
Lo mejor: la sintonía interpretativa entre los integrantes de la pareja protagonista es incuestionable, siendo meritorio al encarnar unos personajes que no distan (en esencia) a los habituales transformándose rápidamente en caricaturescos pero entrañables; la fórmula narrativa respetada (con una serie de reminiscencias que justifican el propio devenir sin posibilidad de tan siquiera intuirlo) es formidable, sorprendiendo de buen seguro incluso al más curtido en estos lares; el enésimo cambio de registro del director en su ya dilatada carrera no desentona con su particular metodología, manteniendo intacto su violento estilo (tanto dialectal como accional) uniendo las múltiples piezas que conforman el rompecabezas (la cinta) sin fisuras.
Lo peor: la referencia al maestro Alfred Hitchock no es meramente literal sino visual, apreciándose una escena (poco después de la apertura) que recuerda enormemente a la respectiva de El resplandor sin aprovecharse posteriormente en virtud de un humor (exageradamente negro u ofensivamente escatológico) brutal como la póstuma redención conyugal; la presentación de los elementos que sirven de armas es abrupta e indiscreta, revelándolos con demasiada antelación; el guión no agradará a los menos atrevidos juzgando el cúmulo de traiciones e imprecaciones que alberga valiéndose de unos giros con sensacionales anticlímax tan funcionales como gratuitos, con un ritmo de viaje (he aquí el motivo del título) tremendamente adictivo.
Daniel Espinosa
We need to so something (Sean King, 2021)
Ficha técnica
Título original: We need to so something Año: 2021 Nacionalidad: EEUU Duración: 94 min. Género: Suspense, Terror Director: Sean King Guión: Max Booth Reparto: Vinessa Shaw, Sierra Cor, Pat Healy, John Cronin y Lis Alexis
Sinopsis
Una familia se refugia para evitar una tormenta pero queda atrapada...
Valoración
Lo mejor: el panorama de apertura (con una sirena alertando a la población de la inminente presencia de una fuerte tormenta eléctrica o algo más devastador) genera mucha expectación, aprovechándose hasta el ecuador el desconcierto cual para cautivar al público; la autolisis como forma de sentirse vivo (llamar la atención suele ser la primera opción pero en este caso no es así) es un enfoque cuanto menos reflexivo, mas el delirio de Cotard (aquel popularmente conocido como el síndrome del cadáver andante) al que se hace alusión también merece un estudio profundo e intimista; la escena de la extraña visita que merodea el domicilio (cercenándose una parte del ser en cuestión) junto a la del viaje astral (terminando de la manera más visceral posible) son las dos mejores secuencias de la cinta, no siendo sencillo destacar más debido a la abundancia de planos gratuitos e interminables así como numerosos recursos (sin ir más lejos el de la serpiente de cascabel) que tornan el visionado en banal e inverosímil.
Lo peor: el parsimonioso (casi soporífero) ritmo narrativo no logra inquietar sino desesperar al espectador, retándole a que no pierda los nervios (ni la cordura) como les ocurre a los protagonistas (en especial al integrante que ejerce de padre de la disfuncional familia en cuestión) al emplearse un burdo e irracional guión que trata de encontrar aliciente en supuestos elementos de comedia negra que no provocan carcajada sino desidia; la verdadera historia (que transcurre en paralelo a los hechos plasmados en un pasado reciente que de algún modo ha propiciado el desolador presente mediante una relación que deriva en un práctica oscura de nigromancia) no se expone correctamente, haciéndose con una retrospectiva tan prometedora como ineficaz al desarrollarse sin coherencia; la retahíla de teorías sobre qué ha originado el desastre que se intuye ha arrasado el exterior no tiene fundamento alguno, siendo conjeturas que a la postre solo sirven para sumar minutos a un filme que enturbia la excelsa carrera de Pat Healy.
Daniel Espinosa
Willy’s wonderland
(Kevin Lewis, 2021)
Ficha técnica
Título original: Willy’s wonderland Año: 2021 Nacionalidad: EEUU Duración: 84 min. Género: Comedia, Terror Director: Kevin Lewis Guión: Kevin Lewis Reparto: Nicolas Cage, Emily Tosta, Caylee Cowan, Beth Grant, Terayle Hill, Grant Cramer, Ric Reitz, Chris Schmidt y Duke Jackson
Sinopsis
Un conserje se ve obligado a pasar toda la noche en un perturbador parque de atracciones que se acaba convirtiendo en una auténtica pesadilla al tener que luchar contra monstruos para lograr sobrevivir...
Valoración
Lo mejor: la (re)afirmación de que la figura de Nicholas Cage es eterna, transcurriendo la friolera de ochenta y cuatro minutos (la duración total del metraje) sin pronunciar palabra alguna (lo cual tiene un mérito enorme al transmitir sus emociones mediante acciones e imperceptibles gemidos provocados por el esfuerzo que en determinados compases realiza) llenando la pantalla; la recreación de la que para muchos fue la época dorada del entretenimiento (los ochenta) es sublime, recurriendo a elementos sencillos (como el pinball o el vídeo) pero efectivos a pesar del ajustado (sino escaso) presupuesto de esta especie de traslación de la célebre saga de videojuegos Five nights at Freddys; la artesanía que se observa en cada plano es fantástica (aunque derive con frecuencia en el uso indiscriminado de autómatas de ortopédico movimiento), mas los antaño creadores de alegrías son variados e intigrantes en apariencia.
Lo peor: el carisma del ya citado actor al que (in)conscientemente se rinde tributo (reclamo absoluto de la velada) es directamente proporcional a la irritabilidad que suscita el grupo de coprotagonista (unos preadolescentes introducidos en la trama con el único propósito de ejercer de anunciadas víctimas); la premisa (siendo tremendamente generosos en la catalogación) es tan absurda como el resto de historia (pecando de nuevo de magnánimos), no trascendiendo de un precario entretenimiento para quienes se hallen en casa con sus camaradas (tras saborear ingestas cantidades de alcohol) en busca de algo baladí e insustancial; la retahíla de películas que podrían citarse como mejores alternativas a la presente es sumamente extensa, sin ir más lejos la modesta The banana splits movie de Danishka Esterhazy o la espléndida Benny loves you de Karl Holt por mencionar dos que guarden un tono parecido (por no sentenciar idéntico) al que ocupa.
Tres historias entrelazadas en un escenario de ciencia ficción... un misterio que debes resolver... un juego de cartas narrativo en el que deberás resolver enigmas interactuando con el sistema por correo...
Valoración
Recomponiendo las vivencias de los tres protagonistas (Arturo Harris, Patrick Hearts y Vaiana Simons), las cuales se van compaginando alternativamente mientras recorren las estancias (almacén, comunicaciones, control, durmientes, enfermería, laboratorio, motores y navegación) del desolador medio de transporte en el que se desarrollan los hechos, se irá revelando paulatinamente la trama; la escasa (por no sentenciar nula) información inicial provocará que se vayan resolviendo aleatoriamente enigmas hasta que se atisbe algún clarificador indicio.
Caminos delimitados, círculos giratorios, cifrados antiguos, citas célebres, criptogramas reveladores, cuadrículas planetarias, engranajes móviles, esparcimientos populares, figuras geométricas, formas evolutivas, frases incompletas, plantillas perforadas, secuencias moleculares, símbolos lingüísticos y sistemas primitivos; estos son solo algunos ejemplos de los retos a afrontar hasta llegar al desenlace (ya sea el parcial o el completista porque se han contemplado dos), residiendo en el camino hasta llegar a él la esencia del brillante trabajo.
Tras una más que probable acumulación de combinaciones tan distintas (abarcan de dos a ocho cifras) como las respuestas automáticas de la Turing (la inteligencia artificial de la embarcación con la que se interactúa durante la misión), uno comprueba el escrupuloso raciocinio argumental respetado (bebedor directo de clásicos como Alien o 2001: Odisea en el espacio); en cuanto a la épica historia, aclarar que la cuantiosa documentación adicional la dota de un aura mágica todavía mayor a la que el sinfín de matices tangibles aportan.
Las comparaciones son odiosas (e injustas) pero esta es la aventura menos exigente de las tres que hasta la fecha han visto la luz desde una perspectiva resolutiva (los desafíos no exigen tantas dotes deductivas sino observacionales) y, a criterio personal, la más apasionante por la realista e inmersiva exploración de las estancias transmitiendo de veras dicha sensación; a medida que se atisba la línea temporal correcta se evitan tediosos bucles eternos (trayendo a colación una de las ideas tratadas), residiendo en ello la mayor barrera.
En resumen, este título inaugural de la línea (en la presente reseña ocupa el segundo lugar por mero orden alfabético) garantiza el disfrute para un amplio abanico de público, y aunque algunas pruebas (las más convencionales de hecho) no guardan demasiada relación con el guión, las ilustraciones que las acompañan son gloriosas, por lo que suplen dicha carencia; cada fragmento es una obra de arte (textual y visual) en sí misma, mas el minimalismo que prima en los menos espectaculares consiguen su desconcertante efecto con total convicción e incidencia.
