Dead snow 2: Red vs Dead 28-03-2024 16:02 (UTC)
   
 

Dead snow 2: Red vs Dead
(Tommy Wirkola, 2014)


Dead snow 2: Red vs Dead




Ficha técnica


Título original:
Dod sno 2
Año:
2014
Nacionalidad:
Noruega
Duración:
100 min.
Género:
Acción, Comedia
Director:
Tommy Wirkola
Guión:
Tommy Wirkola
Reparto:
Vegar Hoel, Stig Frode, Martin Star, Orjan Gamst y Monica Has


Sinopsis


Un hombre armado de valor tendrá que combatir a un ejército de zombies, empresa para la que contará con la ayuda de un grupo profesional estadounidense especializado en acabar con los no muertos.



Crítica


Cinco años han pasado (con un bochornoso debut americano de por medio la temporada pasada con la insufrible Hansel & Gretel 3D, siendo el principal motivo de tan insatisfactoria incursión la enorme participación de la industria hollywoodiense en todas las decisiones productivas, imposibilitando que el noruego se consagrara en el siempre desatendido pero eternamente agradecible submundo cinéfilo en el que ha querido posicionarse desde sus inicios con el cortometraje australiano de corte minimalista Remake allá por el dos mil seis) desde que Tommy Wirkola dejara esa modesta y a la vez gran obra muy próxima a la serie z menos políticamente correcta titulada Dead snow (o Zombis nazis, según la región de adquisición de la copia en formato doméstico, pues en la gran pantalla jamás fue proyectada más que en festivales especializados), la cual expande sus horizontes ahora con una secuela esperada a la par que correcta (ni mejor ni peor, en la misma l
ínea); los amantes del antaño laureado y en la actualidad venido a menos (a prácticamente nada de hecho, como bien denota su tercera parte del hombre araña, cuyas revisiones están resultando una auténtica delicia) Sam Raimi reconocerán ciertas particularidades de aquel sentido del exceso sanguinario del que hacía gala éste, siendo el maquillaje de la presente una delicia que, unido a otros factores, hace que el producto cumpla con creces con su cometido de entretener a base de demencias varias, a cada cual más salvaje (en especial en lo referente al gran plano visual).

La función de la película es bien simple, proponer al espectador acomodarse en su butaca previamente reservada (si es que está numerada, pues se ha extendido la tendencia a adquirir la entrada sin atribución de lugar) flanqueado por una bebida y unas palomitas y salir de la sala de mejor humor del que había entrado, y eso con toda probabilidad se consumará tanto entre los que disfrutaron de la anterior como entre los que no, es decir, quienes la tildaron de obra de culto indispensable y aquellos que no llegaron a entender por qué un producto de tales características vio la luz con tanta aceptación por parte de propios (público) y extraños (crítica) se podrán entretener de igual modo aunque diferente regocijo; con algunas situaciones más forzadas que el fingimiento que uno simula para evitar que le bloqueen el paso ofreciéndole productos asaltándole en plena calle (los pocos que no hayan recurrido a ello ya saben otra estrategia para evitar tan cotidiano intento de venta directa) y otras tan fluidas que se antojan expresamente diseñadas para la ocasión (algo axiomáticamente imposible al haberse observado previamente en otras), la película continúa narrando el ferviente enfrentamiento entre humanos y zombies (nazis, además), contando ésta vez los primeros con la inestimable colaboración de un escuadrón americano y un ejército de comunistas, entremezclándose la sabiduría de los dominantes tecnol
ógicos y de los armamentísticos.

Todo comenzó tan bien... (en la breve introducción que precede a la cinta en sí misma se resumen los hechos más relevantes del primer volumen de la franquicia), un grupo de amigos en una cabaña disfrutando de alcohol y desmadrándose... pero encontraron un viejo cofre lleno de oro y, al decidir apropiárselo, despertaron a su dueño legítimo, un escuadrón zombie nazi proveniente del mismo infierno que no dudó en matarlos, escapando de semejante carnicería únicamente Martin (Vegar Hoel, a quien el protagonismo ni le supone un lastre ni le diezma), al que mordieron pero logró sobrevivir gracias al buen uso de una sierra mecánica (en poco más de sesenta palabras ya deben mencionarse dos reminiscencias, las de Braindead: Tu madre se ha comido a perro por el logotipo de la camiseta de uno de los jóvenes y Evil dead  por esta herramienta leñadora) y la iniciativa de devolver la fortuna, pero una moneda cayó accidentalmente en el bolsillo de su abrigo y eso lo condenó a no librarse del mal persecutor...; justo en este punto arranca la historia, con tan particular héroe acosado por los defensores del más allá de la esvástica teniendo una fuerte colisión automovilística y despertando en un centro sanitario en el que, tras un traumático recobro de la conciencia, descubre que ha sido acusado de las múltiples muertes acontecidas y que ha sufrido una satánica implantación corporal (los poderes que le otorgan son la base humorística de la trama), a partir de aquí, asesinatos sin compasión, violencia sin mesura y ríos (sino mares) de sangre es lo que sigue, una serie de atrocidades visuales que arremete contra la religión, las autoridades y todo tipo de personas (tampoco los niños y discapacitados se salvan) suscitada a raíz de la insaciable codicia de Herzog (Orjan Gamst, entregado en su misión de infundir pavor) y su tropa, y es que el comandante de Einsatz en mil novecientos cuarenta y dos enviado a la parte norte de Noriega para proteger los buques de guerra que los alemanes escondieron en las angostas entradas del mar no cesará hasta consumar su venganza...


Algo que no se le puede reprochar al autor de su visita al país donde todos los sueños se pueden cumplir (al menos eso es lo que se ha asegurado desde siempre al referirse a los Estados Unidos) es la multitud de referencias que ha asumido, aunque es fácil sentenciar por ello que la originalidad escasea y no se tributa sino plagia para ridiculizar las obras aludidas, tales como Zombies party por los diálogos (si bien la mayoría rozan el patetismo), La guerra de las galaxias (se reproducen demasiadas frases textuales de tan célebre saga) y Titanic (el tórrido encuentro en pleno vahos que sirve de cierre está obviamente extraído de ella), amén de las ya citadas en el párrafo anterior, siendo el apartado técnico (y concretamente la fotografía) el factor más agradable, transmitiendo lo plasmado mediante planos de pureza extrema que recuerdan a clásicos como Taxi driver y Bravehart; tal vez citar tantos títulos memorables pueda despertar más interés (y por consiguientes expectativas), pero es menester relacionar lo que se observa con tanta claridad para, sin desviar la atención de otros negativismos como simpleza de la pieza en su conjunto y la poca razón de ser de los personajes secundarios, esclarecer aquellos aspectos que menos agradarán, pudiéndose asimismo matizar en cierta contraprestación que la banda sonora, compresora de estilos musicales tan agradables como distantes, ha sido introducida donde corresponde haciendo sobresaliente alguna que otra escena (cómo no, la emotividad infundida a “Total eclipse of the heart” de Bonnie Tyler eclipsa a todas las demás), y que el hecho de que la acción se desarrolle a plena luz del día es más que meritorio.


En Dod sno 2 (la traducción inglesa e internacional, Dead snow 2: Red vs Dead, ha propiciado que ésta nomenclatura original se extienda considerable e innecesariamente) Tommy Wirkola demuestra poseer (y saber plasmarlo arrítmicamente) una comicidad repleta de ironía, una en el que las tesituras son tan bárbaras que no se pueden concebir sino como un divertimento cuyo telón de fondo es un putrefacto holocausto que amenaza a todos, pues nadie está a salvo de morir de la peor forme imaginable, con muchas (sin duda demasiadas) divagaciones pero pocos (alguno sí se aprecia, como sendos desaprovechamientos tanto del ascuadrón inglés y como de la alianza soviética) rellenos, no permitiendo descansar apenas si no se desea perder algún desmembramiento, alguna lucha o alguna licencia ajena de indudable decoro; resta aconsejar coger el chubasquero, entrar en la sala y prepararse para una batalla tan épica como excéntrica que respeta los cánones más tradicionales (los créditos finales aportan una pequeña escena de menos de veinticinco segundos al más puro estilo desenlace de Freddy vs Jason, detalle que se ha ido perdiendo con el tiempo pero siempre se concibe como idóneo para el cierre de cualquier producción) reinventándolos inesperadamente (predecir qué  sucederá es un reto que no merece la pena asumir por el disparatado devenir de las contingencias), una prometida trilogía (ya sólo resta el último capítulo) aconsejable para todos los públicos (la mayoría de edad es un preciso requisito, por supuesto, ya que el contenido roza el delirio) y, en especial, el sector al que claramente va dirigido el producto, los forofos del gore.




Daniel Espinosa

 
  Menú de navegación
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
  Proyectos de Cementerio de Noticias

COMPAÑÍAS ASOCIADAS Y COLABORADORAS

Algar Editorial

Cat3heory

Escape City Box

Escape Portátil

GDM Games

Mind Escape Games

Sinapsis

SITGES

Verkami

Zacatrus!

PRODUCCIONES AUDIOVISUALES Y FÍLMICAS

Desolatium

Herederas

Shkid

Síndrome de Diego

Verano rojo

  Forma parte de Cementerio de Noticias

Cementerio de Noticias


Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis